Zuculini jugará por Yacob, a quien admira. Y también recuerda a Franco: “Es el número uno. Algún día me gustaría ser Bruno, pero hoy soy el hermano de ...”.
El paso del tiempo sólo acentúa sus personalidades diametralmente opuestas. Bruno y Franco, los hermanos Zuculini, son tan unidos como diferentes. El mayor mudó toda su hiperactividad a Génova y el menor está a punto de tener una nueva oportunidad en la Academia por la suspensión que arrastra Claudio Yacob. Se lo nota aplomado, sin ese instinto de llevarse el mundo por delante que tenía Franco cuando todavía estaba en Racing. “Algún día me gustaría ser Bruno, pero hoy soy el hermano de Franco. Es famoso, pero más que nada buena gente. Me pasa por arriba en todo. Siempre fue el primero y lo seguirá siendo. Lo que hizo en Racing es alucinante”, le dice a Oléel volante central de 17 años.
-¿Es complicado tener que reemplazar a Yacob, de lo mejor del equipo en el campeonato? -La Flaca es el capitán y también es mi ídolo. Es difícil reemplazarlo. Trato de imitarlo en cada práctica de fútbol y lo miro mucho. Es un orgullo que me hable y me dé indicaciones.
-¿Qué te contesta cuando le decís que es tu ídolo? -Se ríe mucho, pero yo se lo digo de verdad, eh. Me dice “Zucu, tratá de hacer eso”, pero lo intento y mucho no me sale. Es un jugadorazo Yacob. Yo tengo muchos defectos y no conozco mis virtudes, je. Tengo que pararme mejor en la cancha, no correr tanto.
-¿No se pondrá celoso Franco? El también te habla mucho ...
-Es el número uno. Imposible igualarlo. Por ser mi hermano ya es mi ídolo, pero es raro porque a Franco lo vi todos los días de mi vida. En cambio Yacob es mi ídolo futbolístico.
-¿Te sigue de cerca? -Me llama cada dos días y nos damos aliento. El está rotando en Genoa y yo también estoy buscando mi lugar en Racing. En Italia lo tienen como un chico todavía. Tiene 20 años recién cumplidos y lo llevan de a poco.
-¿No le dijiste que vuelva para jugar juntos? -Eso no. Yo sé que él llegó hace poco a su club y la idea es que lo compren. Aunque es cierto que el sueño de la familia es que podamos jugar juntos. Qué lindo sería poder compartir el Cilindro con la camiseta de Racing... Algún día lo podremos lograr.
-¿Siempre fueron tan diferentes? -Yo salgo a mi mamá y Franco, a papá. Los dos son calentones, manejan igual de mal y se enojan por todo. En Inferiores, si el torneo duraba 24 fechas, él jugaba 15 partidos porque lo echaban en nueve. A mí apenas me expulsaron una vez, me parece.
-Franco trababa con la cabeza y recién debutado no tuvo dramas en quedar frente a frente con Graieb, otro nene ...
-(Risas). Ufff, yo soy todo lo contrario. Ojalá pudiera ser como Franco dentro de la cancha, pero no me sale. De chiquito, a mi hermano le gustaba pelear y discutir. Pero es buena gente, eh. En Escobar no puedo caminar una cuadra con él porque lo paran todos. Creo que llegó tan lejos por ser querible y de gran corazón.
-¿Jugaron juntos? -En Escobar. Y con mis amigos siempre le ganábamos a los de él. Jugábamos arriba, pero no hacíamos goles. Recuerdo que Franco se calentaba y volvíamos a casa por distintas veredas.
-¿Pensaste que sería más fácil jugar en Primera? Tenés el ejemplo de tu hermano ...
-Lo que hizo es increíble, una locura. En casa no podemos creer que ya esté en Europa. Es muy raro que en tan poco tiempo pudiera debutar, ser figura, ir a la Selección y ser vendido a Europa.
-¿Ya soñás el partido contra Arsenal? -No sé si jugaré, pero seguro será difícil. Arsenal junta mucha gente ahí y mete. Pero me la aguanto ...
Bien a lo Zuculini ...
Fuente: Olé
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